Como padres muchas veces desearíamos poder comunicarnos con nuestros hijos, sobre todo si son pequeños, a un nivel ‘adulto’ o más consciente al menos, para entender los procesos por los que pasan y qué les causa determinados problemas en su desarrollo o su conducta. En general son los padres los que formulan las preguntas sobre las que se va a trabajar, salvo en niños de a partir de 10 años, que en caso de desearlo ellos mismos, pueden formular también sus propias preguntas.
Una canalización ‘Escucha al Niño’ puede ayudarte en momentos de crisis, de indecisión, de transición a nivel profesional o personal y de búsqueda personal o espiritual. Es compatible con cualquier otro tipo de terapia, justo porque proviene de tu propia fuente. Es una ‘pincelada’ más que te puede ayudar a ver las cosas desde un punto de vista más desapegado o elevado, libre de juicios y de interferencias de la mano de otras personas. Es conectar contigo mismo en realidad, pero en otro plano que está por encima de las cargas emocionales que soportamos en el día a día. Si bien yo como ‘escuchadora’ nunca podré ser un ‘filtro’ completamente cristalino, la información que recibo es al fin y al cabo tuya y proviene de un lugar lleno de luz, conciencia y amor.
El método ‘Escucha al Niño’ es especialmente beneficioso para personas que no pueden manifestarse a través del lenguaje, sea del tipo que sea, bien por una enfermedad, un estado de coma o una discapacidad. Estas personas están realmente deseosas de poder comunicarse como lo hacemos los que no tenemos trabas ese sentido, y precisamente por eso las canalizaciones realizadas con ellos suelen ser mucho más fluidas y espontáneas.
Tienes dificultades para concebir o llevas demasiado tiempo esperando ese mágico momento y deseas recibir información sobre tu proceso hacia esta meta, independientemente de la que te puedan dar los médicos o las estadísticas? Si es éste tu caso, conectarte con el alma de tu posible futuro bebé a través de una canalización ‘Escucha al Niño’ puede abrir un espacio de esperanza dentro de ti. También conectarte con tu energía más elevada puede darte respuestas en cuanto a qué aspectos en tu vida necesitan madurar o en qué áreas puedes recibir ayuda para preparar tu camino hacia esa maternidad/paternidad tan deseada.
Independientemente de cuál sea el resultado final de tu proceso, en estos momentos de tanta incertidumbre puedes beneficiarte de una perspectiva libre de etiquetas sociales, pesos transgeneracionales desactualizados y/o miedos y bloqueos irracionales que te impiden fluir con la biología de tu cuerpo y con sus ritmos naturales.
La línea que separa los diferentes planos de conciencia y las diferentes dimensiones es cada vez más fina. Esto hace que la conexión con nuestros seres queridos que han fallecido sea mucho más fácil hoy en día de lo que nos podemos imaginar. Es posible que alguien muy cercano a ti ya no esté a tu lado en el plano físico pero sientas su presencia a través de mensajes muy diversos, en momentos determinados: sensaciones físicas, sonidos inexplicables, sueños vívidos, corazonadas, ‘coincidencias’… Con una canalización ‘Escucha al Niño’ de la modalidad Levensbrug (‘Puente entre Vidas’) puedes conectar con esa persona de manera más consciente y explayada, haciéndole las preguntas que necesites. Él o ella estará gustoso de recibir tu intención de comunicaros y de contestarte y compartir contigo el estado en el que se encuentra. Y sobre todo, de poder establecer una conexión contigo de esta forma.
Si sientes que la manera en la que llegaste a este mundo, o la manera en que diste a luz a uno de tus hijos fue especialmente traumática, o que dificultades actuales de tu vida o de la de tus hijos pueden tener con el momento de tu/su nacimiento, es posible procesar y trascender esta herida por medio de una canalización ‘Escucha al Niño’ orientada a ese momento en particular. El beneficio de este tipo de canalización es, en este caso, tanto para la madre como para el bebé, independientemente de en quién de los dos se centre el trabajo.
Al igual que nuestros seres queridos fallecidos, hay almas que por razones de afinidad en determinados estados de vibración, pueden acompañarnos y quedarse con nosotros un tiempo. Independientemente de si su efecto en nosotros sea positivo o negativo, en ocasiones conviene establecer un diálogo con ellos para ayudarles a encontrar su camino hacia la luz. Podemos liberarlos a base de entender el porqué de su enganche energético con nosotros y de hacerles ver que ya no es necesaria esa convivencia. De esta manera nos liberamos a nosotros también de la vibración que les estaba atrayendo, poniéndonos manos a la obra en solucionar el conflicto que generaba esta vibración.
También se puede establecer una conexión con los guías espirituales de la persona. Estos pueden ser personas fallecidas que le eran muy queridas y que, por tanto, la acompañan favorablemente y no necesariamente deben abandonarla, y también seres de luz como ángeles, extraterrestres y maestros ascendidos.
Al igual que podemos limpiar nuestro campo energético de nuestro cuerpo (aura), podemos también limpiar espacios de energías pesadas o bloqueadas. Con una canalización de limpieza de espacios se envían dichas energías a la luz, dejando así espacio para que la nuestra propia se pueda expandir y manifestarse en alta vibración en el lugar donde vivimos o trabajamos; incluso en donde estamos pasando una vacación.